lunes, 16 de marzo de 2015

¿Qué iba a decir...?

El ojo humano visualiza el entorno unas cinco o seis veces por segundo, y con ello recopila grandes cantidades de información de la que solo se conserva una parte.

Todas las noches, el cerebro desecha recuerdos del día y guarda otra información. La pérdida de memoria es un proceso necesario y frecuente, que en ocasiones se relaciona con la falta de atención, el estrés o la ansiedad.

Otra de las causas de estos despistes es que la memoria se codifica en un lugar determinado: si estoy en el salón y voy a la cocina a por unas tijeras, cuando cambio de estancia ya he salido del lugar donde se creó el recuerdo, por lo que este se desvanece.

Debemos preocuparnos de estos despistes: cuando encontremos dificultades con las palabras y no nos demos cuenta ni al ser corregidos; cuando no seamos capaces de recordar qué hicimos el día anterior, ni siquiera cuando nos lo mencionan; y cuando las personas se preocupan por nuestros fallos de memoria y seguimos tranquilos.

viernes, 13 de marzo de 2015

A plantarle cara al insomnio !

El insomnio es el trastorno del sueño más frecuente entre la población y es cada vez más común. Por ello, la Asociación Mundial de Medicina del Sueño quiere plantarle cara.
¿Cuándo se considera que una persona tiene insomnio? Es tan fácil como percibir que el sueño no es reparador ni de calidad, cuando repercute en la vida diaria. 

Existen distintos tipos de insomnio:
El más frecuente es el relacionado con la dificultad de coger el sueño, el denominado de conciliación. Está muy relacionado con la ansiedad, con el estrés. 
Hay otros tipos de insomnio como el relacionado con el despertar repetido durante la noche, el relacionado con un despertar súbito y precoz a medianoche, tras el cual es imposible retomar el sueño...
En conclusión, ya que el insomnio puede llegar a considerarse una enfermedad bastante grave, es conveniente consultar a un especialista para practicar estudios del sueño. Así por lo menos, estaríamos más seguros y tendríamos esta enfermedad algo más controlada.

martes, 10 de marzo de 2015

El número Pi no es 3,14...

El 20 de noviembre de 2005, grabado por 26 cámaras y con decenas de testigos de la Universidad de Agricultura y Ciencias Forestales del Noroeste, el chino Chao Lu recitaba de memoria 67.890 decimales del número pi.

Pi no es 3,14, como aprendimos en el colegio. Ni siquiera es 3,141592653, según la notación anglosajona, del mes 3, el día 14, del año 15, a las 9 horas, 26 minutos y 53 segundos. Y pi tampoco es el larguísimo número que memorizó Chau Lao. “Pi es la razón entre el perímetro de una circunferencia y su diámetro”, aclara Cilleruelo, miembro del Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT), en Madrid.

Pi, por lo tanto, es eterno.

viernes, 6 de marzo de 2015

El amor nos cambia, y nos cambia de verdad...

Un equipo de investigadores descubrieron que tener una relación romántica produce alteraciones en el cerebro. La persona enamorada tiene una mayor conectividad entre las regiones del cerebro asociadas con la recompensa, la motivación y la regulación de la emoción.
Para llegar a esta conclusión, se examinaron las diferencias en los patrrones de conectividad cerebral en cien estudiantes universitarios, dividiéndolos en tres grupos: los enamorados, los que dejaron de estarlo y los solteros.


Los investigadores encontraron en el grupo de los enamorados un aumento de la actividad cerebral en reposo en un área cerebral. Sin embargo, la actividad cerebral en otra área se redujo en el grupo de alumnos que habían dejado de estar enamorados. 


Según explican los investigadores, el aumento de la conectividad en estas regiones del cerebro puede ser el resultado de los esfuerzos frecuentes (de los enamorados) para controlar su propio estado emocional y el de su pareja.
Si el amor siempre es difícil de disimular, parece que tampoco tiene dónde esconderse ante una resonancia.